Durante años han sido los hombres los que han llevado las riendas de toda la sociedad y en todos los ámbitos, siendo conscientes de ello o no, han introducido su propio. El mundo ha sido de los hombres y han construido todo el entorno teniendo en cuenta solo su punto de vista (podemos encontrarnos ejemplos en todos los ámbitos pero por dar un par de ejemplos podemos nombrar: la medicina, en la que nos encontramos como el catalogo de síntomas de las distintas enfermedades se ha redactado teniendo como modelo al hombre, así nos encontramos que las mujeres que no encajan en esos síntomas tienen una mayor dificultad para detectar ciertas patología; o la educación, seguimos viendo como desde muy pequeños a los niños y niñas se les sigue representando la familia tradicional como la regla general, en la que el padre sale a trabajar mientras que la madre se queda al cuidado de niños y la casa)
En esta tarea a mi me gustaría reflexionar sobre las ciudades y lanzar una pregunta ¿las ciudades son entornos igualitarios? ¿realmente están diseñadas pensando en los diferentes colectivos que en ellas residen? A. Ortiz Guitar en su libro "Hacia una ciudad no sexista" afirma que "el espacio no es neutro, sino más bien un espacio socialmente construido". En las ciudades viven colectivos muy diversos y cada uno con necesidades distintas ¿las ciudades se han diseñado pensando en todos ellos? Podemos afirmar que en la construcción de las ciudades se han ignorado las experiencias y necesidades específicas de las mujeres, estando centrado su diseño pensado para la esfera productiva (pública). Como ya he nombrado anteriormente, el hombre ha desarrollado su actividad en la esfera pública siendo el encargado, entre otras cosas, del diseño de la ciudad las cuales ha creado teniendo en cuenta sus necesidades (las productivas) y olvidando todas esas tareas reproductivas y de cuidado que se le han adjudicado a las mujeres tradicionalmente (esfera privada).
Si damos un paseo por cualquier ciudad podemos observar como encontramos ejemplos en los que apoyarnos para poder afirmar que en la construcción de las ciudades no se ha tenido en cuenta la perspectiva de género. A continuación nombraré algunos de los ejemplos que nos podemos encontrar:
- Los roles de género asignan a la mujer el cuidado de niños y ancianos: Si las ciudades fueran inclusivas
nos encontraríamos con aceras que tuvieran la anchura suficiente para poder pasar por ellas con un carrito de bebe o empujando una silla de ruedas; debería haber ausencia de barreras arquitectónicas, siendo lo deseable que las aceras estuvieran al mismo nivel que la calzada y que en el caso de existir escaleras éstas tuvieran una rampa con la inclinación adecuada. Afortunadamente, cada día más, vemos en algunas ciudades que se está teniendo en cuenta esta esfera reproductiva y de cuidados y se van adaptando a sus necesidades. Sin embargo podemos afirmar que prima la esfera productiva, el hacer las vías más rápidas y amplias para el desplazamiento en coches sigue siendo una prioridad y las mujeres (que siguen siendo en mayor porcentajes las que se encargan de las labores de cuidado) tienen que adaptar sus rutinas a todas esas barreras que se encuentran (aceras estrechas, escalones, coches aparcados taponando los pasos de cebra...)
- Otro ejemplo de que las ciudades no están pensadas teniendo en cuenta a la mujer son los baños públicos. En el diseño de las ciudades no se ha tenido en cuenta que las mujeres pueden quedarse embarazas y tienen unas necesidades especiales durante esa etapa (necesitan ir con más asiduidad al wc). En las ciudades no nos encontramos con los suficientes baños públicos en los que puedan entrar, por lo general hay que acudir a los baños de los bares o de establecimientos públicos.
- Siguiendo con el tema de los wc, también nos encontramos (afortunadamente cada vez menos) con que la zona habilitada para el aseo de los bebes se encuentra en el baño de mujeres, remarcando ese rol reproductivo y de cuidados que se le asigna a la mujer. Cada día hay más padres (y esperemos que el número siga subiendo) que son capaces de compartir de una forma igualitaria estas labores con la mujer por lo que encontrarse con la ausencia de cambiadores en una zona neutra le imposibilita compartir al 100% estas responsabilidades.
- Otro ejemplo que podemos poner está relacionado con la doble carga (profesional y familiar) de las mujeres. Aún sigue siendo muy habitual que la mujer al salir del trabajo vaya a recoger al niño al colegio y de camino a casa compren el pan, la merienda, la cena, etc. Para que esto sea posible es necesario el comercio de proximidad y, desgraciadamente, estamos viendo como día a día las pequeñas tiendas de barrio están desapareciendo por no poder competir con las grandes superficies, que se suelen encontrar alejadas de las zonas residenciales.
Podríamos seguir poniendo ejemplos que pusieran de relieve como las ciudades no son espacios igualitarios; podríamos hablar de la violencia e inseguridad que sufren las mujeres en las ciudades; podríamos nombrar como viven los ancianos la ciudad; podríamos señalar las pocas calles con nombre de mujer que existen y como eso nos invisibiliza; podríamos... pero esto daría para varios post, lo interesante es que cada uno seamos conscientes de las dificultades que ciertos colectivos encuentran en nuestras ciudades y seamos capaces de solicitar a nuestros respectivos Ayuntamientos una solución.
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